La palabra en inglés, “stickiness”, es un término técnico de internet, que se refiere a la capacidad de un sitio web para lograr que los navegadores alarguen la visita en sus páginas. Stickiness literalmente significa pegajoso. Lo “pegajoso” de un sitio se asocia con tres factores: 1) Duración: ¿Cuánto tiempo permanecen los visitantes en el sitio?; 2) Profundidad: ¿Qué tan profundo exploran el contenido?; 3) Frecuencia: ¿Qué tan seguido retornan los visitantes?
Las grandes compañías gastan millones de dólares tratando de incrementar lo pegajoso de sus sitios. Por ejemplo, el jugador promedio de bingo, en bingo.com invierte más de 500 minutos (¡más de ocho horas!) jugando bingo. El sitio pasó las tres pruebas de pegajosidad (je-je, suena chistoso ¿verdad?): duración, profundidad y frecuencia. La razón por la que los mounstrosos sitios en internet como Google, Yahoo, eBay o CNN están tan interesados en la pegajosidad, es debido a que su modelo primario para generar ingresos, es vender publicidad. Ellos quieren mostrar al anunciante cuantos globos oculares pegajosos pueden rondar sus sitios. Saben que cuanto más tiempo permanezcan los ojos pegados a su sitios, mayores serán las probabilidades de que alguno de clic en sus anuncios. Es por esto muy importante para estas empresas hacer que sus sitios sean pegajosos.
Si tú estás a penas abriendo tu sitio Web, no te preocupes tanto de hacerlo pegajoso. No podrás vender espacios de publicidad hasta que tu sitio tenga decenas de miles de hits por semana. Tu meta primordial no es proporcionar espacios para anuncios. La meta es producir de inmediato (si no es que más rápido) flujo de efectivo de la venta de productos y servicios.
Tú no tienes el tiempo o el dinero para desarrollar un sitio pegajoso. Así que no te preocupa la pegajosidad - ¿cuánto tiempo permanecen en tu sitio? ¿qué tan profundo entran? ¿cuántas veces regresan?. Tu interés primordial es la rapidez – la velocidad a la cual las personas aceptan darte su dirección de correo electrónico. Si te dan permiso para comunicarte con ellos, entonces ¡tu estas en control de la pegajosidad! Tienes todo el tiempo del mundo para educarles vía correo electrónico sobre las maravillas de tu sitio. Si no obtienes esa dirección de correo electrónico - ¡puf! Ya se te fueron.
Lo que requieres es convertirte en experto de información muy delimitada. No se necesitan millones de visitantes para obtener millones de dólares. De los cientos de millones de personas en la red, tú necesitas convencer a tan solo 10,000 personas altamente interesadas, de que te den permiso para desarrollar una relación con ellos. Esas 10,000 personas te harán rico. Tu interés no es la pegajosidad, sino la rapidez. No te interesa que los visitantes peguen los ojos a tu sitio. Te interesa más que peguen los ojos a tus correos. Con rapidez, crea tu lista de correos, con consistencia y respeto crea una relación y gánate el derecho de vender hasta la riqueza, a esas personas. Tu abundancia se trata de rapidez y calidad. Haz tu sitio rápido, más adelante tendrás tiempo de hacerlo pegajoso.
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